Los alcaldes del Llevant, en pie de guerra contra el Gobierno central. Los ediles mostraron ayer su indignación al descubrir que los 4,4 millones de euros prometidos por Pedro Sánchez para reparar los daños causados por la borrasca Gloria a su paso por la isla el pasado enero finalmente no llegarán. Y es que Demarcación de Costas no se hará cargo de la reconstrucción y rehabilitación de las zonas afectadas.

Este anunció cayó como un jarro de agua fría en los Consistorios afectados, que confiaban en que el Ejecutivo central se haría cargo de restaurar las zonas dañadas. "No puede ser que el Estado español pretenda que otra administración asuma el gasto de una instalación que depende exclusivamente de Demarcación de Costas", denunció el alcalde de Manacor, Miquel Oliver, quien sostuvo que cada uno tiene que asumir "su responsabilidad y las tareas que le tocan".

Manacor fue uno de los municipios más damnificados por el temporal, viéndose destrozados el paseo de Calas de Mallorca, el de s'Illot, el de Cala Murada y el de Porto Cristo. En palabras de Oliver, debe ser el Gobierno central quien tiene que hacerse cargo de su reconstrucción. Y advierte: "Si no es capaz de gestionarlo como toca que transfiera las competencias al Govern de les Illes Balears o a los ayuntamientos".

Por su parte, Costas declaró que solo puede asumir el arreglo de las pasarelas rotas, acordonamientos, cartelería, captadores o la demolición total de las estructuras arrasadas por la borrasca. Y especificó que en ningún caso se hará cargo de la reconstrucción y rehabilitación de las zonas afectadas. Lo que se traduce en que deberán ser los ayuntamientos quienes hagan frente a esta inversión pese a no ser de su competencia. Una situación que el alcalde de Manacor tachó de una "auténtica vergüenza".

Desde Son Servera y Sant Llorenç calificaron la situación como decepcionante y preocupante. El consorcio lamentó que la consecuencia directa de la negativa de Costas es que "se deja definitivamente, pero con menos tiempo de actuación, en manos de los dos ayuntamientos y del consorcio la responsabilidad directa de adoptar las medidas necesarias de tipo técnico y de financiación para mitigar los efectos que la no-declaración de emergencia de la regeneración de la playa de Cala Millor".

Ante esta situación, los Consistorio definieron unas líneas de actuación para llevar a cabo, con cargo a los presupuestos de ambos ayuntamientos, la limpieza de las playas y la reparación de instalaciones dañadas, así como la reactivación de un proyecto de alimentación de arena de procedencia terrestre para la playa de Cala Millor.

También solicitarán, al igual que Manacor, reuniones con las instituciones para conseguir fondos públicos y se promoverán encuentros del sector turístico para "recoger puntualmente las incidencias" que la situación provoca en el sector.

La promesa de Sánchez, fallida

Cabe destacar que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, prometió durante su visita a las zonas damnificadas ayudas "inmediatas" para los afectados de la borrasca Gloria. Desde los ayuntamientos y el Consell cifraron en más de diez millones de euros los destrozos causados por el temporal. Una cifra que desde el Ejecutivo central se redujo hasta los 4,4 millones.